Los asesinatos a periodistas en México continúan en aumento, ya que la muerte de Armando Rodríguez, de el Diario de Ciudad Juárez hizo que el numero de occisos llegara a 10 este año, poniendo a la nación azteca como la más peligrosa en el continente para desempeñar esta profesión.
Rodríguez fue tiroteado al salir de su casa el jueves de la semana pasada. El cubría la fuente policiaca.
La gran mayoría de estos crimenes siguen sin resolverse, a pesar de que una fiscalia especial, que también investiga casos del narcotráfico, se comprometio a esclarecer los hechos. Ya son más de 40 muertes en los últimos ocho años de periodistas que buscan libertad de expresión, después de estar controlados, censurados y maniatados en 71 años de gobiernos del Partido Revolucionario Institutional (PRI).
El gremio de periodistas está dividido, como consecuencia del yugo que ejercia el PRI. Con la llegada de Vicente Fox en el 2000 a la presidencia, la presión y control gubernamental ceso, pero el crimen organizado surgió como una fuerza no antes sentida en los periódicos y medios electrónicos.
Enrique Santos, presidente de la Sociedad Interamericana de Periodismo (SIP) dijo desde Miami que México se ha convertido en el lugar más inseguro de América para ejercer el periodismo.
Leonarda Reyes, directora del Centro de Periodismo y Etica, un organismo no gubernamental, dijo que las divisiones del gremio periodistico son el resultado de la censura que el PRI ejercio desde 1929 hasta el 2000. Los 10 periodistas muertos en el 2008 se suman a los mas de 4,000 asesinatos contabilizados del 2000 para acá. Estos crimenes son atribuidos por el gobierno mexicano a la violencia protagonizada por y en contra de los narcotráficantes.
En un editorial, el Diario de Juárez pidió al presidente Felipe Calderón que esclarezca de verdad estos crimenes, o que pida y permita la ayuda de la ONU y los Estados Unidos. El diario dijo ambos cuentan con recursos y tienen la posibilidad de sustentar la protección para esclarecer los crimenes. Reyes se opone a esta sugerencia, ya que dice el gobierno mexicano debe brindar protección a toda la sociedad civil en casos de violencia, no solo a casos relacionados con periodistas.
Entre otros crimenes este año, dos reporteras indígenas, Felicitas Martínez y Teresa Bautista, fueron acribilladas en Oaxaca. Ellas laboraban en una radio comunitaria en ese estado.
Entradas
